Ya nada intimida a los violentos. Un policía de la División de Inteligencia de la Agencia de Investigación Criminal fue asesinado de múltiples disparos en la tarde de este jueves en la ciudad de Rosario cuando salía de su trabajo.
Fuentes de la investigación informaron a Infobae que el ataque fue perpetrado por sicarios que se desplazaban en un auto de color rojo, según los testimonios recolectados en el lugar, cuando el inspector César Carmona salía de la base donde trabajaba, ubicada en Lamadrid y Salva.
Malherido, el policía fue trasladado hasta el hospital Roque Sáenz Peña, donde murió.
El caso es investigado por la fiscal de Homicidios Dolosos Alejandro Ferlazzo, quien ordenó el relevamiento de la escena del crimen, toma de testimonios y búsqueda de cámaras de videovigilancia que hayan podido captar al vehículo en el que circulaban los agresores.
Según la cámara que llegó a captar la emboscada, los sicarios cruzaron el auto rojo a metros del Ford Fiesta de Carmona –que estaba de civil–, a quien acribillaron a tiros. En las imágenes, que acompañan esta nota y ya están en manos del Ministerio Público de la Acusación, se puede ver que al menos una persona es la que jala el gatillo.
Peritos forenses contabilizaron 13 vainas servidas en la escena de la balacera, en la que había un gran hermetismo y pesar de los compañeros de la fuerza de seguridad de la víctima.
Poco más tarde, encontraron un Citroën C3 abandonado en Sánchez de Bustamante al 400, a cinco cuadras de la sede de la Agencia de Investigación Criminal donde ocurrió el crimen. Investigan si fue el auto utilizado en el ataque sicario.
“El ataque fue dirigido a esta persona. Estamos viendo cuál fue el móvil, por qué le fueron a disparar… Es pronto para saber si hubo amenazas previas. Tenemos que hablar con los familiares de la víctima todavía. Nosotros buscamos a dos personas”, dijo el fiscal Ferlazzo esta tarde en conferencia de prensa.
El funcionario judicial agregó que Carmona llevaba su arma reglamentaria y que, según los primeros indicios, no llegó a intercambiar disparos. “No sabemos si estaba detrás de alguna investigación puntual”, remarcó.
Con este hecho, el departamento Rosario acumula 198 homicidios dolosos en lo que va del año, según el Observatorio de Seguridad Pública de Santa Fe. De ese número, 26 ocurrieron en enero, 32 en febrero, 22 en marzo, 22 en abril, 32 en mayo, 14 en junio, 18 en julio, 24 en agosto y 8 en septiembre.
Según estadísticas oficiales, la mitad de estos hechos son homicidios por encargo. El 70 de los casos, a nivel general, está enmarcado en el contexto de las economías ilegales del delito, como el narcotráfico.
La delegación de la Agencia de Investigación Criminal (una policía de investigaciones, que tiene distintas divisiones y brigadas) ya había sido baleada en dos oportunidades este año. La primera fue a comienzos de febrero, cuando gatilleros en moto realizaron siete tiros y dejaron dos notas, una de ellas, dirigidas a dos presos que fueron condenados por narcotráfico y que tienen vinculación con la banda narco Los Monos.
El último atentado contra la Agencia de Investigación Criminal ocurrió el 25 de agosto pasado, cuando dos sicarios en una moto roja dejaron un cartel con contenido intimidatorio y luego abrieron fuego contra la fachada, donde se contabilizaron nueve impactos.
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