En la mañana del lunes 29 de enero, la Contraloría General de la República, en una acción coordinada con la Contraloría de Bogotá, visitaron las instalaciones del Patio Taller de la Primera Línea del Metro de Bogotá, en Bosa, para realizar la respectiva vigilancia y control fiscal a los recursos públicos empleados para la megaobra, que comprende el Tramo 1 y las troncales alimentadoras y complementarias.
Los funcionarios que lideraron la visita fueron el vicecontralor General, Carlos Zuluaga, y el contralor Distrital, Julián Mauricio Ruiz, quienes recorrieron el Patio Taller, la industria de prefabricación de pilotes de cimentación y de elementos estructurales del viaducto, así como algunas obras civiles del viaducto.
Ahora puede seguirnos en WhatsApp Channel y en Google News.
“Son pilotes que se utilizan para la cimentación de las pilas del viaducto, con profundidades entre 30 y 60 metros”, les contó el gerente general del Metro de Bogotá, el ingeniero Leonidas Narváez, mientras les explicaba cómo se realiza la construcción del viaducto por el que pasarán los vagones del metro.
Según comentó el vicecontralor, la contratación realizada por el Instituto de Desarrollo Urbano, IDU, para la construcción de las obras, cumplió con los requisitos de calidad, gestión predial y ambiental.
No obstante, dijo que hay un retraso del 8% en las actividades relacionadas con la gestión de la compra de predios y la movilización de algunas redes. “Bogotá es una ciudad que tiene todavía falta de elaboración clara de donde y como están las redes y eso es básicamente lo que ha ocasionado ese retraso”, reconoció.
“Es importante enfatizar que las actividades relacionadas con la fabricación de aquella estructura que se va a instalar progresivamente en la primera línea (…) Son más de 5.800 pilotes, de los cuales 800 han sido construidos, e instalado 400 de ellos en la Primera Línea, lo que significa que la ejecución del Metro prevista para que la etapa de ensayos de 2023 se pueda cumplir sin ningún contratiempo”, agregó el funcionario.
Los funcionarios también estudiaron el avance de otras importantes obras para Bogotá, como la troncal de Transmilenio de la avenida 68 y sus respectivas troncales, la avenida Ciudad de Cali, y la avenida Caracas en algunos de sus tramos. El contralor de Bogotá destacó que “sí presentan alguna serie de retrasos, como es la 68, la Av. Ciudad de Cali y Av. Caracas en algunos tramos. Retrasos que varían en un 10 y 15%”.
Mediante resolución No. ORD-80112-1435, la Contraloría General de la República autorizó desde el 3 de febrero de 2023 la supervisión fiscal de los recursos destinados a la construcción de la primera línea del metro de Bogotá, en conjunto con la Contraloría de Bogotá.
La auditoría se enfoca en revisar y evaluar la contratación, el estado de las obras, la gestión predial y ambiental y otros aspectos que se relacionan con las troncales alimentadoras y complementarias de la primera línea del metro de Bogotá.
Un equipo interdisciplinario conformado por 12 auditores coordinados por la Contraloría delegada para el sector de infraestructura es el encargo de realizar la inspección. Algunos de los objetivos de la auditoría son:
- Realizar una revisión y evaluación de la contratación efectuada por el Instituto de Desarrollo Urbano (IDU) entre 2019 y 2023, relacionada con la construcción de troncales alimentadoras y complementarias para la Primera Línea del Metro de Bogotá. Dicho análisis abarcó desde la fase de estructuración hasta las etapas precontractual, contractual y postcontractual (cuando proceda), con el objetivo de determinar si se ajustó al marco legal vigente y si se cumplieron las obligaciones y responsabilidades pertinentes, considerando los objetivos de la contratación estatal.
- Mediante inspecciones técnicas a las obras finalizadas o en proceso, se evaluará su estado, verificando si se ajustan al propósito y alcance establecidos en el contrato, así como a las condiciones de calidad de construcción, de acuerdo con las especificaciones técnicas acordadas y la normativa técnica aplicable en el país.
- Examinar y valorar la gestión de terrenos y el manejo ambiental asociados a la construcción de las troncales alimentadoras y complementarias (Avenida Caracas) de la Primera Línea del Metro de Bogotá, con el fin de establecer si se han llevado a cabo de manera correcta y en los plazos debidos.
