El nombre de Jean-François Fogel habrá de ser recordado no solo entre quienes lo conocieron, también entre aquellos que se vieron influenciados por su trabajo y sintieron de cerca su amor por Latinoamérica. No era famoso o muy “googleable”, pero no cabe duda de que dejó huella en su campo.
Nacido en Francia, en marzo de 1947, se hizo conocido por su libro “La prensa sin Gutenberg: El periodismo en la era digital”, que escribió junto a Bruno Patiño, el cual vio la luz en la década del 2000. Un libro anticipatorio en muchos sentidos, que resultó convirtiéndose en faro de muchos lectores.
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En las páginas de “La prensa sin Gutenberg: El periodismo en la era digital”, los autores se ocupan de investigar el curso del periodismo en aquellos años y su paso del papel a lo digital, a partir de un análisis previo a la página web del diario Le Monde, para ver su rentabilidad y alcance.
Cinco años después de aquellos primeros acercamientos, el significado de la prensa online muta y es así como Patiño y Fogel se dan a la tarea de profundizar en torno a los orígenes de la prensa digital y sus diferencias con la escrita y la audiovisual, los nuevos tratamientos de la información y la manera como, de alguna forma, su irrupción supone una revolución similar a la que en su momento causó la imprenta.
Este trabajo le permitió a Fogel ser considerado por grandes referentes del periodismo y fue así como el propio Gabriel García Márquez lo invitó a formar parte de la Fundación Gabo, cuando esta llevaba el nombre de Fundación para el Nuevo Periodismo Iberoamericano.
Desde entonces, el francés estuvo comprometido con el desarrollo del periodismo en España y Latinoamérica. Con la fundación, a la que le era devoto y con la que se sentía identificado a fondo, dictó talleres sobre periodismo y formó parte de la Junta Directiva, como presidente del Consejo Rector y maestro de la institución.
Como amigo personal de García Márquez y colega, Fogel estuvo cerca del autor de “Cien años de soledad” en su etapa más comprometida con el periodismo, cuando este residía entre México y Barcelona, y el francés se encontraba en París.
La renovación digital en el periodismo fue siempre el área de especialidad del francés. A lo largo de su carrera, habiéndose formado como licenciado en Ciencias Económicas del Instituto de Estudios Políticos de París (Sciences Po), fue redactor jefe del diario Libération, trabajó en la Agencia France-Presse, Le Point y El Magazine Littéraire; además, fue asesor del New York Times, entre otros importantes medios de alcance mundial en Europa y América.
Fue vital para la renovación de Le Monde, ayudándolo a salir de una de las crisis más complicadas de su historia, a mediados de la década de los 90, a causa de la llegada de lo digital y las implementaciones de los portales web. Asesoró la dirección del diario desde 1994 a 2002, renovó su plataforma en línea, que sigue siendo líder entre los medios de Francia, y creó la primera zona de pago en línea para subscriptores.
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Fogel también fue autor del libro “El periodismo ante la desinformación”, editado y publicado por la Fundación Gabo, en el que el francés compila las reflexiones, análisis y propuestas de expertos y maestros sobre las raíces y el funcionamiento de la desinformación, así como los caminos que desde el periodismo se pueden recorrer para contribuir a sociedades mejor informadas y más democráticas.
En esta publicación, disponible de manera gratuita y digital, Fogel planteaba, también, la exploración en torno a las posibilidades y herramientas con las que cuenta el periodismo para investigar y combatir el negocio de la desinformación desde sus raíces más profundas. El francés insistía en la necesidad del periodismo de “adaptarse y transformarse continuamente en el entorno digital y las formas de consumo de las audiencias”, y así “evitar caer en rutinas que llevan a rechazar el cambio”.
Fogel fue también el responsable de la plataforma digital del grupo France Televisions, una de las tres cadenas más importantes en Francia. Además, se desempeñó como director del Executive Master of Media Management, del Instituto de Estudios Políticos de París (Sciences Po) y publicó varios libros sobre literatura francesa, Internet y América Latina, entre los que pueden destacarse “Fin de siglo en La Habana” (1994) y “El testamento de Pablo Escobar“ (1995). Por su libro “Morand-Express” obtuvo el premio Broquette-Gonin de la Academia Francesa en 1981.
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Jean-François Fogel falleció en marzo de 2023, a la edad de 76 años, en su natal Francia, a causa de un accidente cerebrovascular.
A raíz de su fallecimiento, Jaime Abello Banfi, presidente de la Fundación Gabo, lo recordó como un maestro, amigo, consejero y cómplice. “Tenía un profundo conocimiento e interés en América Latina y la cultura hispanoamericana, escribió libros sobre Cuba y Colombia (…), amaba el periodismo y la literatura, se preocupaba por la libertad de expresión y la calidad de la democracia en la región e hizo primero que nadie lo que hoy llamamos transformación digital, de la cual se volvió experto práctico, promotor generoso y guía clarividente”, comentó.
Su legado en el periodismo será inolvidable y, con los años, seguramente será más apreciado por los lectores. Su vida y obra habrán de reclamar los clics y, en la posteridad, su trabajo será fuente obligada de referencia. Mucho más de lo que ya es.
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