(Ernesto Guzmán Jr./)
Las autoridades poseen información según la cual Néstor Gregorio Vera Fernández, conocido como ‘Iván Mordisco’ y uno de los líderes de la estructura residual del Estado Mayor Central de las Farc, ha sufrido un notable debilitamiento en su liderazgo y control sobre sus estructuras. Además, su capacidad para generar finanzas ilegales se ha visto reducida tras perder a un aliado clave, conocido por el alias ‘Calarcá’. Dicha información según un informe al que tuvo acceso W Radio.
La fractura en la relación entre los dos cabecillas principales habría comenzado a tomar forma a lo largo del segundo semestre del año 2023, momento en el cual surgieron discrepancias significativas debido a la incapacidad de ambos líderes para llegar a un consenso respecto a la contribución económica que debía ser aportada por cada uno de los frentes bajo su liderazgo.
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En el reporte al que W Radio tuvo acceso de igual manera se informó sobre la situación lo siguiente: “habría impuesto sus mayorías y Calarcá, a regañadientes, aceptó continuar enviando dinero desde su territorio, pero a finales de noviembre pidió estar en la mesa de negociación con el Gobierno”.
No obstante, se informa que ‘Iván Mordisco’ habría hecho valer su superioridad numérica dentro de la organización, y aunque inicialmente ‘Calarcá’ mostró resistencia, terminó por acceder a seguir enviando recursos financieros desde su zona de influencia. Sin embargo, hacia finales de noviembre, ‘Calarcá’ manifestó su intención de formar parte de las conversaciones de paz con el Gobierno, solicitando un lugar en la mesa de negociación.
En ese sentido, en el informe antes mencionado mencionó que: “Dentro de los argumentos estarían el de la cantidad de dinero que aportaba y que, en cuanto a relación costo beneficio, este no se estaba viendo reflejado en exigencias, decisiones y prebendas. Igualmente, ‘Calarcá’ quería tener un poco más de libertad para movilizarse por el territorio sin tener la amenaza de las operaciones militares en su zona de los departamentos de Meta y Guaviare”.
Inicialmente, ‘Mordisco’ rechazó esta solicitud debido a sus sospechas sobre lo que eventualmente se desarrollaría. Preveía una suerte de rebelión interna dentro del grupo que había construido, orquestado y sobre el cual ejercía pleno control. Al tomar conocimiento de estas previsiones, Calarcá reaccionó con amenazas de cesar el envío de fondos y de formar un nuevo grupo escindido, una especie de fracción disidente dentro de las ya existentes disidencias.
En cuanto al Gobierno nacional y el Estado Mayor Central, el presidente de la República, Gustavo Petro Urrego, en su cuenta de X reaccionó a una noticia del 25 de abril en la que se decía que 15 integrantes de la estructura conocida como ‘Carlos Patiño’ fueron objetivo de un operativo en el cual se empleó artillería de gran calibre contra uno de los campamentos de las disidencias de las FARC. Dicho ataque resultó en múltiples heridos entre los ocupantes del campamento.
La publicación del jefe de Estado decía lo siguiente: “No hay que jugar con la paz, si es guerra es guerra. Detener la guerra implica ser serio con la Paz. El EMC en el Cauca no la ha tenido al matar la población civil. Esta es la mayor acción en su contra”.
En aquella oportunidad el Ministerio de Defensa de igual manera se pronunció al respecto diciendo que: “Duro golpe a disidencias Farc: Fuerzas Militares neutralizaron a 15 miembros del autodenominado Estado Mayor Central, quienes habrían muerto en desarrollo de operaciones militares en zona rural de Argelia, al sur del departamento del Cauca. Estos individuos estarían adelantando controles ilegales del narcotráfico en esta el Cañon del Micay sobre área rural de El Plateado”.
